RED inauguró dos espacios para emprendedores y empresarios en la UNTREF

El grupo asociativo realizó la primera edición del Tanque de ideas y una mesa de trabajo especialmente dedicada al tema del financiamiento.

La Red de Empresarios para el Desarrollo (RED) volvió a desplegar algunos encuentros en la sede que la Universidad Nacional de Tres de Febrero tiene en Valentín Gómez 4752, Caseros, esta vez con dos nuevas propuestas: una destinada a vincular emprendedores y empresarios, y otra que apunta a conformar grupos de trabajo alrededor de las problemáticas comunes que enfrentan las PyMES.

En la sala SUM, tuvo lugar la primera edición del Tanque de ideas, una iniciativa que apuesta a generar modalidades de colaboración entre quienes tienen proyectos innovadores y quienes cuentan con los medios para hacerlos crecer. Con una dinámica de feria, el espacio se llenó de propuestas muy distintas entre sí pero con el mismo espíritu creativo para aportar una cuota de novedad a rubros como indumentaria, juguetes, deportes, educación y eficiencia energética.

Ante un público conformado por directivos y dueños de PyMES, los emprendedores y emprendedoras mostraron sus ideas que causaron sorpresa y despertaron curiosidad e interés.

Fue el caso de las polleras para hombres de Wallace, un emprendimiento de Rodrigo Sosa, Ricardo Pereyra y Gonzalo Cardarelli que surgió de sus propias necesidades.

“Un día me encontré con una necesidad que era usar una pollera. Me imaginaba que era súper cómoda, y no encontré a nadie que me la pudiera vender. Entonces vimos un campo inmenso para explorar”, compartió Rodrigo.

“Nos dimos cuenta que lo que teníamos entre manos era la posibilidad de brindar una experiencia totalmente diferente y transformadora acompañando estos cambios que se vienen dando en la sociedad en relación a los géneros y a las nuevas masculinidades”, aportó a su vez Ricardo.

Ambos coincidieron en la importancia de este tipo de eventos para conseguir apoyo. “Nos gustaría trabajar en conjunto con gente más experimentada, de la cual poder aprender, para imponer nuestra marca con un producto estrella que vemos que tiene todo para instalarse. Pudimos conversar con algunos empresarios y nos vamos bastante nutridos de acá”, valoró Rodrigo.

Por ahí también estaban los chicos de Gaboto, un proyecto a cargo de Ignacio Campal y Gonzalo Jury que busca romper con algunas convenciones en el segmento de los deportes de tablas.

“Diseñamos una línea de vehículos eléctricos para practicar wakeboard, skate, surf, mountainboard y longboard. El producto llama la atención. Por la gente con la que estuvimos hablando, algunos podrían fabricar alguna pieza para algún prototipo. La idea de estos espacios es buenísima, lo que le falta siempre a un emprendedor es el contacto, la posibilidad de vincularse con alguien que le interese el proyecto”, aseguró Ignacio.

Los otros emprendimientos que se presentaron fueron Pedagogía Digital, comandado por los ingenieros Juan Giustino y Juan Monzó, que asombraron con un juego para introducir a los niños en el lenguaje computacional; Electricidad y control, de Mariano Somadossi, quien llevó a la universidad un tablero inteligente de medición de energía para montar en las empresas y analizar el tipo de consumo que hacen; y go! go! Study, una agencia virtual de asesoría de estudios en el exterior que llevan adelante Gerónimo Tutusaus y Natalia de la Rosa.

Para Pablo Gómez, impulsor del Tanque de ideas, esta primera reunión superó las expectativas. “Vinieron más de 40 colegas de todas las ramas de actividad que te puedas imaginar y que se engancharon con todas las propuestas. El empresario se va con un montón de ideas y el emprendedor, emocionado, con más ideas todavía. El balance es super positivo”, concluyó.

Una charla para crecer

Como parte de estas actividades, RED también organizó una mesa de trabajo dedicada al financiamiento.

Las mesas de trabajo son un ámbito de debate que impulsa la RED en el que pequeños y medianos empresarios comparten experiencias y se asisten a sí mismos respecto a una diversidad de temáticas.

Es así que en la sala de reuniones de la Secretaría Académica de Caseros se dieron cita 15 de ellos dedicados a diferentes actividades, que en muchos casos tomaron contacto por primera vez con oportunidades que no sabían que existían.

La charla estuvo a cargo de la presidenta de Baigorria, Rita Cosentino, que rompió el hielo hablando de las ideas que se suele tener sobre el financiamiento desde las empresas.

“Algunas se jactan de no haber pedido nunca nada. Pero también es verdad que el paradigma de hacer todo con los recursos propios puede ser bueno si tengo un negocio con una gran rentabilidad, y un freno si tengo máquinas viejas y quiero cambiarlas, si necesito un galpón nuevo o darle un giro a mi comunicación”, ejemplificó.

Por otro lado comentó que es una equivocación asociar el financiamiento exclusivamente a los créditos. “Los bancos son una alternativa si tengo buenos plazos y tasas, si mi empresa tiene ingresos que le permiten calificar. Pero hay otras herramientas que funcionan hace tiempo, dependiendo de la política, y que pueden aprovecharse muy bien”, explicó.

Entre ellas, mencionó los aportes no reembolsables (ANR). “Son subsidios que también tienen una serie de requisitos, es dinero para invertir en determinados bienes y luego el Estado verifica que se haya invertido en ellos”, continuó. También se refirió a las asistencias técnicas. “A veces cuesta verlas como financiamiento. Son consultorías, formas en las que tenés a disposición expertos que van ayudando a mejorar tus procesos en diseño, en innovación”, detalló.

Cosentino remarcó que es fundamental tener en claro el proyecto para el que se busca financiamiento. “Algunos lo buscarán para crecer, otros para obtener una mayor rentabilidad o ser sustentables en el tiempo”, dijo, y agregó que hay que ser ordenados y estar respaldados por cierta documentación. Así, no solo hay que tener un plan de negocios y de inversión, sino estar inscripto en el Registro Único de la Matriz Productiva (RUMP), acreditar personería y contar con constancia de CUIT y un certificado MiPyME. Incluso propuso que si el caso lo amerita, se puede recurrir al aval de una sociedad de garantía recíproca (SGR), un tipo de entidad que gran parte de los asistentes desconocía.

"Estas sociedades intervienen cuando la inversión que querés hacer es tan grande que tu patrimonio no es suficiente para el banco. Por la garantía que te dan, cobran un porcentaje del crédito. Uno piensa que al final el crédito va a salir 2 o 3 puntos más pero si se tiene una tasa al 18 % y a pagar a 7 años es para pensarlo. Hay que analizarlo siempre dentro del contexto en que se está obteniendo el financiamiento”, definió.

La presidenta de Baigorria planteó que la experiencia de muchas empresas indica que financiarse e invertir permite mejorar y crecer. “Solo necesitamos convicción, dedicación y paciencia”, concluyó.

Del encuentro participaron representantes de las PyMES Almar, Sabbatini Equipos Hidráulicos, EMR, Kazer Comunicación, Industrias Maya, Especiera Caseros, Logística Barlocco, Neocolor, IR3D Sudamericana, FDM, OXGrips, Specled Argentina, Independencia y Luma Productos.