Esta joven PyME de Villa Lynch produce termotanques solares especialmente adaptados a las condiciones locales. Hoy sus equipos están presentes en distintas regiones del país y buscan desembarcar en Bolivia.
Nadie podría decir que detrás de esa puerta hay un grupo de operarios ensamblando termotanques solares. Parece la casa de cualquier vecino, pero por dentro bulle de actividad. Desde el galpón del fondo los ruidos metálicos crecen, los chispazos saltan, una pila de carcasas espera su turno en la línea de montaje. Nadie, tampoco, sospecharía que lo que se produce en este garaje de Villa Lynch llega a destinos tan remotos como La Rioja.
Estamos en NEXUM, una joven empresa especializada en energías renovables que en 2020 salió al mercado con un modelo de termotanque solar cuyo éxito, explica el ingeniero industrial y socio gerente de la empresa, Sebastián Ghisio, se basa en haber sido específicamente concebido para la situación local.
“En Argentina hay muchos termotanques importados, sobre todo de China, y tenés otros fabricantes locales. Nuestro gran diferencial es que desarrollamos el equipo pensando en las condiciones de radiación solar y de aguas preponderantes en Argentina. El agua acá tiene mucho sarro, entonces tenés el problema de que los termotanques que son de tubos de vacío o de inoxidable se rompen o se corroen. Nosotros desarrollamos un equipo cuyos materiales son cien por ciento nacionales y está principalmente hecho en polietileno de alta densidad, un tipo de plástico que soporta bien el agua a esas temperaturas y no junta sarro ni se pica. Siempre doy el ejemplo de la pava eléctrica: después de uno o dos años encontrás el fondo de inoxidable todo manchado, y las paredes que son plásticas impecables. Nosotros hicimos nuestros termotanques con el concepto de las paredes”, apunta Ghisio.
Claro, para dar con su producto estrella tuvieron que investigar a fondo y hacer muchos ensayos, hasta que lograron la aprobación del Instituto Nacional de Tecnología Industrial (INTI). Otro de los aspectos que resalta Ghisio es que se trata de equipos de muy fácil instalación y que no requieren ningún tipo de mantenimiento. “Los pensamos para que se puedan instalar en el medio del campo y que si hay algún problema, que sería muy raro, se pueda resolver con la ferretería del pueblo”, desafía.
Como cuenta, él y los otros socios de la firma, los ingenieros mecánicos Christian Faraoni y Fernando Vidal venían de las áreas de calidad y de I + D de Pirelli y aprovecharon mucho de esa experiencia en homologación, ahora pensando en aportar lo suyo a un mundo que exige cada vez más sostenibilidad.
“Veíamos que las energías renovables estaban poco desarrolladas en Argentina. Para nosotros son el futuro, tanto por el cuidado del medio ambiente como por un tema económico. La idea era hacer una empresa de triple impacto que genere empleo, haga productos que tengan consecuencias positivas en el entorno y que sea económicamente rentable”, continúa Ghisio.
Su crecimiento fue exponencial; comenzaron ellos solos produciendo uno o dos termotanques solares por día. Hoy llegan a las 10 unidades diarias y emplean a cinco personas, con miras a ampliar su personal por el crecimiento en la demanda que vienen teniendo. “Apuntamos a seguir subiendo la producción, llevarla a 250 o 300 equipos por mes. La realidad es que no estamos consiguiendo hacer stock porque cada vez hay más pedidos. Por suerte el boca a boca nos está ayudando muchísimo”, comenta satisfecho.
En ese salto que dio la empresa también intervino UNTREF Incuba, el espacio del CIDEM dedicado a dar apoyo a los emprendimientos intensivos en tecnología y conocimiento. La universidad acompañó a Sebastián y sus socios para que apliquen al Programa Emprendimientos Dinámicos de la Secretaría de Industria y Desarrollo Productivo, asistiéndolos en el diseño y la implementación del proyecto.
"Con ese proyecto conseguimos un Aporte No Reembolsable con el que compramos una plegadora. Antes teníamos que pedir que nos hagan el favor de prestarnos la máquina y era bastante engorroso. Ahora toda la fabricación se hace adentro, ya no dependemos más de nadie y eso nos da una flexibilidad importante. Con ese financiamiento también diseñamos un modelo de mesa de trabajo para el ensamblado, que nos ayuda a trabajar con mejor ergonomía y a agilizar mucho la producción”, detalla.
Su cartera de clientes es muy diversa y como compartió, tienen tres canales de venta, cada uno de los cuales representa un tercio de su negocio.
“El canal al consumidor final lo abastecemos básicamente a través de la parte digital, estamos desarrollando una presencia en las redes sociales, trabajamos con Google Adds y vender a través de Mercado Libre es una publicidad indirecta bastante grande. Después tenemos el canal de distribuidores, hoy los tenemos en Misiones, Corrientes, Córdoba, Santa Fe y en Provincia de Buenos Aires pero queremos seguir expandiéndonos, federalizarnos todo lo que podamos. Y un tercer canal es a constructoras o a gobiernos directamente, donde son proyectos de viviendas sociales que dentro de los pliegos tienen como requisito que las casas tengan termotanques solares”, detalla.
Entre esos proyectos cuenta que vendieron más de 500 equipos para barrios de La Rioja, también en la ciudad bonaerense de Lincoln en el marco de una iniciativa de Caritas, y en ciudades santafesinas como Firmat.
Consultado sobre el tipo de ahorro energético que generan en una vivienda de esas características, el ingeniero industrial aclara: “Nuestros termotanques son de 100 litros y cada uno conforma un módulo que se puede ampliar con más módulos en caso de que sea necesario. Para una casa de dos o tres personas, lo que necesitas es un solo módulo y lográs un ahorro del 80 % en el consumo de gas o electricidad del termotanque convencional o el calefón que tenés instalado”, ilustra.
Por otro lado aclara que tienen otras variedades de termotanques como los que vienen con una resistencia eléctrica incorporada y no necesitan de ninguna otra instalación que los complemente, o los que soportan la alta presión de agua y son ideales para las viviendas que utilizan bombas presurizadoras.
Pero sus equipos no solo son para uso doméstico, también encuentran algunas aplicaciones industriales. “Hemos instalado en tambos para agua de limpieza, en criaderos de peces para subir la temperatura del agua donde los cultivan, en una fábrica de galletitas también para calentar los aceites, en una autopartista. La mayoría de las industrias necesitan agua caliente, incluso para lo más simple, como los vestuarios de la gente que trabaja ahí. Hay industrias que buscan reducir costos y otras que tal vez son proveedoras de multinacionales, las cuales les exigen generar menos contaminación ambiental y les pagan la instalación de esta clase de equipos”, relata.
De cara al futuro, Sebastián cuenta que están abriéndose a la exportación y que su objetivo es desembarcar en Bolivia. “Es un mercado que nos interesa porque además nuestro producto se adapta perfecto. En Bolivia encontrás la misma radiación que en Jujuy. Acá en general tenemos una radiación muy alta, de hecho Jujuy tiene de los valores más altos en el mundo. Si vos ponés un equipo de baja radiación en esos lugares, lo que ocurre es que calientan tanto el agua que la hierven, y con eso no solo maximizas la generación de sarro sino que podés tener accidentes muy serios. A nuestros equipos eso no les pasa porque están diseñados para ese tipo de radiación. Bolivia es un mercado importante porque ellos tienen toda la matriz con gas y su producción viene cayendo, no están descubriendo nuevos pozos. Estamos en tratativas, es una oportunidad más que interesante para nosotros”.
Por ahora, la idea de NEXUM es seguir escalando y convertirse en sinónimo de equipos para la producción de energía limpia. “Estamos trabajando en un nuevo proyecto consistente en un aerogenerador residencial que se pueda combinar con una instalación fotovoltaica para alimentar de electricidad a las viviendas, tanto para iluminación como para electrodomésticos básicos como una heladera. Ese sería el próximo hito para nosotros: desarrollar un producto distinto”, concluye.
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