Herramientas para el sector productivo
El pasado 24 de noviembre, el CIDEM, la Fundación Banco Credicoop y la Agencia Nacional de Promoción de la Investigación, el Desarrollo Tecnológico y la Innovación realizaron un webinar sobre las herramientas de apoyo a la innovación que ofrece la Agencia y la principal agenda para el año 2021.
Por el lado del FONTAR (Fondo Tecnológico Argentino), Alejandro Primbas comentó los cambios en la estructura actual a raíz de la fusión con el FONSOFT (Fondo Fiduciario de Promoción de la Industria del Software), lo que permite pensar en el diseño de instrumentos que focalicen la unión de hardware y software en una mirada hacia la industria 4.0 y las nuevas plataformas tecnológicas. También comentó que la propuesta para el próximo año tiene el objetivo ayudar a mejorar las estructuras productivas y la capacidad de innovación del sector privado. En este sentido, se apunta a impulsar las consejerías y asistencias técnicas para empresas, con el fin de conocer las demandas y crear instrumentos acordes a estas, como los ANRs tradicionales y líneas de crédito para I+D y modernización.
Si bien los instrumentos que promueve el FONTAR son aquellos que impulsan el desarrollo tecnológico, la producción de conocimientos para su aplicación, el desarrollo innovador de productos y procesos, y la adecuación tecnológica de procesos que impliquen esfuerzos relevantes de ingeniería, los ejes prioritarios en los se basará el trabajo del año próximo serán salud, alimentos, energía, transformación digital/industria 4.0 y la agenda ambiental. La próxima convocatoria será post-covid para reforzar capacidades de desarrollo en el escenario post- pandemia, apuntando al distanciamiento social, diagnóstico y tratamiento, dispositivos de protección personal y digitalización (4D).
Por su parte, Laura Toledo, directora del FONARSEC (Fondo Argentino Sectorial), habló sobre la importancia de la innovación y de las oportunidades que se pudieron vislumbrar a partir de la pandemia.
“La pandemia colocó a las PyMEs en un escenario donde es necesario promover el cambio a través de algunas herramientas de ciencia y tecnología. Observando a las empresas de base tecnológica (EBT)[1], surge la oportunidad de innovación para la PyME, ya que las EBT tienen la necesidad de recurrir a la tercerización, la asociatividad y la búsqueda de socios para poder llevar sus productos al mercado, y son las PyMEs las que cuentan con los activos complementarios para tal tarea.”
Resaltó que durante la instancia de ASPO (Aislamiento, social, preventivo y obligatorio), varias de las empresas que lograron asociarse, habían tenido anteriormente una relación previa con el FONARSEC o el FONTAR, lo que refuerza la idea que la competitividad no se explica exclusivamente a nivel empresarial, sino que las empresas se hacen competitivas al estar insertas en redes articuladas dentro de las cuales los esfuerzos de cada una se vean apoyados por una serie de externalidades, servicios e instituciones. Es por ello que para las empresas que quieran y necesiten innovar, es clave que busquen acompañamiento de profesionales en vinculación tecnológica, vigilancia tecnológica, formuladores de proyectos, además desarrollar las capacidades de sus propios recursos humanos, conocer las tendencias de la industria donde se encuentra inmersa, como así también conocer los acuerdos públicos-privados con iniciativas del tercer sector y las iniciativas públicas de financiamiento y apoyo estratégico.
[1] Cuentan con una actividad sistemática de I+D+i, personal con un elevado nivel de especialización, proyectos nacidos en el seno de universidades o centros tecnológicos, un negocio basado en tecnologías disruptivas que posibilitan la generación de patentes y otros tipos de propiedad intelectual.
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