Se trata de un proyecto único en la región que articula a grupos de investigación, emprendedores, empresas e instituciones para desarrollar capacidades de fabricación digital. El nuevo espacio tendrá 235 m², estará organizado en diferentes áreas temáticas y contempla una inversión de 22 millones de pesos.
La UNTREF, a través de su Centro de Innovación y Desarrollo de Empresas y Organizaciones (CIDEM) y de su Secretaría de Investigación y Desarrollo (SID) inaugurará, en el 2022, un Laboratorio de Innovación en su sede Los Aromos del Palomar.
Hay varios FabLabs en el país, pero la particularidad del Laboratorio de Innovación de UNTREF es que está montado sobre una Unidad de Vinculación Tecnológica, el CIDEM: esto implica articular grupos de investigación y emprendedores con empresas e instituciones para generar soluciones tecnológicas y sustentables a problemas productivos. Además de la fabricación digital, el laboratorio contará con capacidades para desarrollar software embebido y priorizará temas como la eficiencia energética y los recursos renovables.
El director del CIDEM, Tomás Jellinek, remarcó que otro aspecto que diferencia a la propuesta es su característica tecnológica. El nuevo laboratorio contará con una amplia gama de equipos que incluye desde impresoras 3D de resina y filamento, pantógrafos láser, scanners 3D, ruters computarizados, equipamiento de electrónica, equipamiento de computación de alto procesamiento, cortadoras de tela, máquinas de coser industriales, herramientas y máquinas manuales hasta instrumental de medición y control de calidad.
“Este equipamiento nos permitirá diseñar y prototipar una gran variedad de productos, bajando el tiempo y los costos de los procesos. La idea es poder ofrecerle al empresariado local un servicio que hasta ahora no tenía, y esperamos fomentar el desarrollo del diseño industrial”, destacó.
Lo ambicioso del proyecto también puede medirse por su nivel de inversión. Jellinek explicó que se están destinando cerca de 22 millones de pesos para el acondicionamiento del lugar y la compra de equipos, y que el financiamiento proviene del Fondo Nacional de Desarrollo Productivo (FONDEP), la Secretaría de Políticas Universitarias (SPU) y de la propia UNTREF.
Cómo será el espacio
Desde el CIDEM adelantaron que el laboratorio se ubicará en la planta baja del edificio, contará con una superficie total de 160 m² y estará dividido en diferentes áreas temáticas. El consultor Alejandro Cácharo, uno de los responsables de su diseño, comentó que habrá secciones destinadas a impresión 3D y ruteado láser, otras para trabajos de mecanizado, textiles y de electrónica; para montaje, ensamblado y pruebas, para lavado y acopio de materiales y herramientas y, no menos importante, uno para reuniones y coworking, así como un área de servicios con cocina y baños. Por otro lado, en el tercer piso de la sede habrá un salón de usos múltiples que también se podrá destinar a encuentros de trabajo y como espacio de coworking de los equipos de proyectos, sumando otros 75 m² para el laboratorio.
“Las áreas están delimitadas por el tipo de trabajos que se va a hacer en ellas y también por cuestiones de seguridad e higiene industrial. Por ejemplo, hay un área de mecanizado que va a tener un ruter CNC que funciona por computadora. Ese espacio en sí mismo va a ser cerrado porque es un equipo que genera ruido, viruta y polvo mientras funciona. La posibilidad de tenerlo aislado preserva a las personas y al resto del laboratorio”, graficó.
También señaló que se está poniendo mucho énfasis en que sea un lugar que incentive la colaboración. “La idea de los espacios de coworking es que la gente se pueda juntar a trabajar, ya sea personal de la Universidad, del laboratorio, de otras instituciones o de empresas que vengan a participar de proyectos. Promover el trabajo colaborativo y poner en común los resultados de la innovación es uno de los objetivos principales de un FabLab”, apuntó.
Asimismo desde la ambientación buscarán apuntalar conceptos como la creatividad y el desarrollo. “Para nosotros es fundamental profundizar estas ideas a través de la comunicación interna y el diseño del espacio. Queremos que cuando uno entre al laboratorio sienta que está en un espacio de estas características. En esto es clave la iluminación, los muebles con los que uno trabaja y también el tema de la puesta gráfica. Buscamos que sea un lugar en el que realmente se tenga ganas de estar y que facilite la conexión con un trabajo que tiene que ver con la innovación”, aseguró.
Investigaciones interdisciplinarias con impacto sobre el desarrollo económico y social
El secretario de Investigación y Desarrollo de la UNTREF, Pablo Jacovkis, y el director de Desarrollo de la SID, Diego Federico Hintze, remarcaron la labor que realizan junto al CIDEM para que el conocimiento generado en la Universidad tenga impactos concretos en el territorio y coincidieron en que el nuevo laboratorio profundizará esa línea de acción.
“El CIDEM tiene la función de vinculación y transferencia, la Secretaría la de potenciar la investigación y el desarrollo. Trabajamos articuladamente para que nuestros docentes investigadores y grupos de investigación encuentren demandas locales y territoriales que se traduzcan en respuestas desde el conocimiento y la tecnología. Una mayor articulación entre las funciones de investigación, desarrollo, innovación, vinculación y transferencia, permite que la generación de nuevo conocimiento responda a las necesidades de los actores socio-productivos” aseguró Federico Hintze.
En una línea similar, Jacovkis planteó que el laboratorio va a canalizar ese proceso estratégico que viene desarrollando la Universidad y subrayó que estará abierto a investigadores de diversas disciplinas. “El laboratorio de innovación va a ser interdisciplinario. No solo va a promover la combinación entre las ingenierías y las ciencias exactas y naturales, sino que también va a convocar a las humanidades, las ciencias sociales y el arte”, expresó.
Para él, el progreso científico y tecnológico en la actualidad tiene que ver con el cruce de saberes, y en ese sentido recordó que en 1979 el premio Nobel de Medicina lo obtuvieron un físico y un ingeniero electrónico por la construcción del primer tomógrafo computado. “Pero la interdisciplina no solo es productiva entre las llamadas ciencias duras. En algo tan importante como los orígenes de las poblaciones, hay artículos científicos que demuestran que las pruebas de ADN ayudan a ver en qué momento una población se trasladó a determinado lugar y se mezcló con las poblaciones que había antes. Algo tan privativo de la biología se convierte en una herramienta muy útil para las ciencias sociales y las humanidades. Y viceversa, el conocimiento de actividades sociales puede ayudar a entender por qué evolucionó la tecnología de tal o cual manera”, ilustró.
Un círculo virtuoso
El Laboratorio de Innovación de la UNTREF se plantea también como un ámbito en el que los estudiantes, docentes, grupos de investigación e inventores independientes puedan acceder a tecnologías tanto tradicionales como de última generación para plasmar sus ideas y armar su producto viable.
Según Daiana Ponce, coordinadora de proyectos del CIDEM, el laboratorio está pensado para realizar los primeros pasos de todas aquellas propuestas con aplicación en el sector productivo que traigan los emprendedores e investigadores.
La representante del CIDEM agregó que se va a dar apoyo a estos grupos en las etapas posteriores. “Vamos a acompañarlos en todo el proceso del emprendimiento, desde el concepto, pasando por los ensayos iniciales y los prototipos, hasta su validación en el mercado. En el mismo edificio estará la Incubadora UNTREF, con la que se podrán asesorar sobre cuál es el modelo de negocios más acorde a su proyecto. También se alojarán en la misma sede el CIDEM, la Secretaría de Investigación y Desarrollo y al Laboratorio de Artes Electrónicas e Inteligencia Artificial de la Universidad, que funcionarán de manera integrada conformando un auténtico polo científico tecnológico para la región”, contó.
Ponce destacó que lo más interesante del Laboratorio de Innovación es que agrupa trayectorias que antes parecían transitar por caminos diferentes. “Apostamos a la vinculación entre emprendedores y empresas, mundos que siempre se tomaban por separado y que ahora van a estar unidos. Este es un espacio en el que convergen las universidades, los emprendedores, las empresas, las instituciones y el Estado, generando un círculo virtuoso en el que las capacidades de unos se potencian con las de los otros”, definió.
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