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La Red de Empresarios para el Desarrollo presentó un debate abierto sobre el impacto de la pandemia

El complejo escenario internacional y su repercusión en los sectores productivos argentinos fueron analizados por un panel de lujo que se realizó en la Universidad Nacional de Tres de Febrero con la participación de la politóloga Agostina Monti Salías, el empresario Juan Fera y el consultor Enrique Schonberg Schwarz.




El aumento en los costos de la energía y de la logística por la situación internacional, sumado a la fuerte dependencia que tenemos de insumos producidos en otros países, tiene un impacto directo en nuestras PyMES y exigen la construcción de estrategias conjuntas que puedan atenuar sus efectos. A esa conclusión llegaron los especialistas invitados a disertar en la Universidad Nacional de Tres de Febrero (UNTREF) de la mano de la Red de Empresarios para el Desarrollo (RED). El debate, que contó con el acompañamiento del Centro de Innovación de la UNTREF (CIDEM) y la moderación de la periodista Florencia Barragán, estuvo protagonizado por la politóloga, docente y coordinadora de Proyectos Estratégicos Industriales en el Ministerio de Desarrollo Productivo, Agostina Monti Salías; el empresario y presidente de la Unión Industrial de General Rodríguez, Juan Fera; y el consultor y profesor de la Barcelona School of Management, Enrique Schonberg Schwarz.


Es la primera vez que una agrupación empresaria desarrolla un evento de estas características en la universidad pública. No solo se acercaron empresarios y empresarias, sino también representantes de cámaras industriales y de comercio, de instituciones científicas y tecnológicas, de bancos y ONG´s. Asimismo, hubo una importante presencia de funcionarios de los tres niveles de gobierno. La charla, que tuvo ese componente plurisesctorial, se desarrolló en un ambiente de cooperación y camaradería con la participación de cerca de 100 personas.




Monti Salías destacó que a pesar de que vivimos en un mundo multipolar hoy el poder económico y político que concentran Estados Unidos y China tiene una influencia enorme.


“Apenas empezó la pandemia el problema era cómo hacemos para reemplazar todas las cosas que hace China que son claves para nuestra industria, como los semiconductores. Un montón de empresas, por ejemplo las plantas automotrices, tuvieron que parar la producción no solo por los casos de covid sino porque no tenían ese insumo para fabricar. Seguimos teniendo una fuerte interdependencia económica de estos países”, ilustró


Pero no solo eso, porque la pandemia tiene una incidencia en los costos logísticos. “Ahora se paró el puerto de Shangai por nuevos casos de covid y este colapso trae consecuencias en todo el mundo, y sobre todo para Argentina que está mucho más lejos”, graficó.


En cuanto a la guerra, la politóloga dijo que tuvo consecuencias en nuestras exportaciones. Como contó, Rusia y Ucrania son dos de los principales destinos de los limones que producimos acá. “En 2021, las exportaciones totales a Rusia fueron de 300 millones de dólares, y obviamente esas exportaciones este año no van a estar”, describió.


Rusia es además uno de los mayores productores de gas natural licuado (GNL) y el conflicto bélico provocó la suba de ese commoditie del que nuestro país depende cada vez más. “Esas importaciones van a crecer porque la industria está creciendo y porque ahora los hogares van a demandar más por el invierno”, continuó.


Incluso dijo que hay efectos más indirectos, como ocurre con el aluminio. Rusia es uno de los principales exportadores de aluminio y la guerra hizo que su precio creciera un 43 %.


Si bien Argentina produce y exporta aluminio en bruto, el incremento de su precio internacional repercute en nuestras PyMES, que son grandes usuarias de ese insumo. “La pregunta es qué incentivo va a tener una empresa grande argentina a dejar de exportarlo a un precio más alto y mantener reducido el precio del mercado local”, evaluó


Finalmente, señaló que además de una pandemia y de una guerra, Argentina ha tenido que afrontar los consecuencias de algunas catástrofes naturales, como la bajante del río Paraná, que hizo que la logística de los granos tuviera que hacerse por otros puertos aumentando los costos y bajando la competitividad; y los incendios en Corrientes, que le hicieron perder a la industria de la madera del NEA alrededor de 50 millones de dólares.


“Tenemos que pensar en una política pública que tenga que ver con la resiliencia, con la capacidad de adaptarse. Y esto no solo desde el Estado sino también desde el sector privado, buscando una articulación público-privada”, propuso Monti Salías.


Para ilustrar su punto, la funcionaria indicó que tenemos que atender a la crisis del cambio climático y todas las normas que se están aplicando en torno a esa problemática. “Hoy hay un impuesto al carbono en las empresas europeas que tienen que pagar por su cantidad de emisiones. Por ahora a los productos importados no se les cobra, pero lo están evaluando. Esto va a afectar a nuestras PyMES, no ahora pero si dentro de 6 años. Hay que anticiparse y ver cuáles son las actividades que van a necesitar una transformación hacia una forma de producción más sustentable”, sostuvo.


En una línea similar, el director de Marolio y Maxiconsumo, Juan Fera, se enfocó en el problema de la previsibilidad.


“Todas las PyMES reclamamos eso y no se nos da. Primero porque tenemos un gobierno que nos abre las importaciones y destruye la industria nacional, después nos cubren mucho y entonces generamos inflación automáticamente porque tampoco tenemos competencia. Más tarde nos vuelven a abrir las importaciones y toda la inversión que hicimos en ese momento, en el que estábamos vendiendo con nuestra capacidad plena, se vuelve a derrumbar”, opinó.


Fera se preguntó por qué no se puede trazar un eje y una política industrial en el largo plazo y concluyó que en gran parte es responsabilidad de los mismos industriales. “No nos gustan los que nos dirigen, nos echan porque pensamos distinto y entonces formamos nuevas instituciones y nos vamos separando. La realidad es que los gobiernos tienen que tener con quien hablar, y siempre hablan con dos instituciones, la Unión Industrial Argentina y la Unión Industrial de la Provincia de Buenos Aires. Cuando a nosotros nos corren de esos lugares la representación PyME deja de existir, nuestra voz no es elevada y el camino que nosotros buscamos no está nunca”, prosiguió


Fera insistió en que es fundamental dejar la grieta de lado y trabajar mancomunadamente desde las gremiales empresarias. “Hay que entender que el beneficio de uno en algún momento no debe estar por encima del sacrificio del resto en todo momento. Discutamos todo en una mesa pero el discurso de la industria tiene que ser uno, el de generar trabajo, producir, poder exportar y que las PyMES tengan un diferencial de impuestos porque si no es imposible competir”, completó

Por videoconferencia desde Barcelona, Schonberg Schwarz ofreció un panorama de cómo las empresas españolas se están reconfigurando a partir de la crisis.


“Como esta situación afecta la subida del tipo de tasas en la economía y las finanzas de las empresas, lo que se recomienda es diseñar nuevas estrategias alternativas financieras pero incluyendo a toda la cadena de valor, a los clientes y a los proveedores”, indicó el consultor especializado en marketing internacional.


Asimismo, remarcó que la coyuntura generó escasez de materias primas y que para no frenar la producción, las empresas españolas apuntan cada vez más a buscar “proveedores alternativos”.


Por otro lado, comentó que hay un impacto en los beneficios directos, porque los costos suben y las ventas bajan, y que como consecuencia de eso se están empezando a revisar los modelos de negocios y sus procesos.


También mencionó que se observan cambios en la dirección estratégica de las compañías para que la toma de decisiones sea mucho más rápida y eficiente, y que en ese punto “necesitamos agregar inteligencia a las empresas, invertir en tecnología y análisis de información”.


Para Schonberg Schwarz, también la pandemia y la guerra está obligando a las organizaciones a trabajar el triple impacto. “La inclusión de los Objetivos de Desarrollo Sostenible de las Naciones Unidas está cada vez más presente. Se está empezando a hablar mucho de este concepto de economía circular, que ya dejo de ser una moda para ser cada vez mas parte del discurso y la práctica de las empresas”, enfatizó


Sobre el final, los miembros de la Red de Empresarios para el Desarrollo y el director del CIDEM, Tomás Jellinek, agradecieron la presencia de todos y destacaron que el objetivo de la agrupación es generar conocimiento colectivo y afianzar el vínculo entre empresas y universidad. Jellinek subrayó que la RED es un espacio empresarial totalmente novedoso en el país por el grado de sinergia que tiene con la academia y puntualizó que hace 4 años que está en funcionamiento. “Este es el primer evento público abierto que realiza y es solo el comienzo de una serie de eventos que irá produciendo, así que estén atentos", invitó.


En representación de la RED estuvieron Mariela Tesconi (Neocolor), Rita Consentino (Taller Baigorria), Alejandro Sabbatini (Alfonso Sabbatini e Hijo), Faustino Rodríguez, (Global EMR), Alfredo De Monte (F.D.M.) y Pablo Gómez (Almar Tenis Table). Juntos presentaron algunas iniciativas que están impulsando con el Centro de Innovación de la UNTREF, entre ellas los Círculos de Interacción, un espacio en el que grupos de empresarios de distintos rubros se reúnen para tomar posición de mesa directiva y resolver los problemas cotidianos que afrontan sus empresas; y el Tanque de Ideas, una novedosa propuesta que busca que los proyectos de innovación y tecnología elaborados por los estudiantes universitarios tengan una aplicación concreta en las PyMES del territorio.



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