Empresas en primera persona
Al comienzo de la entrevista, Ingrid nos comentó que la idea se dió a partir de una serie de circunstancias dentro de su círculo personal. Descubramos juntos como se gestó y se puso en marcha el programa en su empresa.
CIDEM: ¿Tenés presente cuál fue el disparador para considerar esta posibilidad?.
IG: Mis dos mejores amigas del secundario tienen hermanos con capacidades diferentes. En aquellos años, realmente no teníamos presente qué pasaría cuando todos fuéramos grandes. Ya en Industrias Maya, me enteré que uno de ellos estaba trabajando por la madrugada en un lugar inseguro y con una retribución muy baja, eso me afecto muy profundamente, dado que él era un chico educado, honesto y con voluntad, tres cualidades que cualquier trabajo requiere. Fue entonces que le propuse trabajar con nosotros, y así empezamos hace más de 15 años. Esta experiencia nos hizo ir por más y desde entonces trabajamos con personas con retrasos madurativos, síndrome de down, hipoacusia y discapacidades físicas menores.
CIDEM: ¿Qué tipo de cambios han tenido que implementar desde entonces?.
IG: Se han realizado pequeñas adaptaciones menores en las instalaciones como por ejemplo agregar sirenas visuales rojas que alertan de un improbable incendio en la planta y vestuarios, en principio eran solamente acústicas. También agregamos cartelería con infografía para las personas que no saben leer.
CIDEM: ¿Qué beneficios sentís que les reportó esta práctica y como lo instrumentaron?
IG: Los empleados se esfuerzan más, es motivacional y superador ver que otro con dificultad puede. Los empleados empatizan muy bien, se ayudan, se explican tareas y procedimientos y cuentan experiencias. Nuestra práctica y política en distribución horaria, normas y políticas internas y sueldo según la tarea realizada es la misma para todos.
CIDEM: ¿Qué devolución te dan las personas que participan del programa?
IG: Las personas con capacidades diferentes son muy responsables y agradecidas por la oportunidad de aprender y trabajar. Además, trabajar dignifica y hace sentir útil a todos. Cuando logran tener una responsabilidad, compañeros de trabajo y un día lleno de desafíos lo aprovechan muy bien y es una gran satisfacción para todos.
CIDEM: ¿Con qué respaldos cuentan para llevar a cabo este programa?.
IG: Existe un programa para la inclusión de empleados con capacidades diferentes, que es el mismo programa que para el resto de las personas. Su nombre es ENTRENAMIENTO PARA EL TRABAJO (EPT) y en el caso de discapacidad es ENTRENAMIENTO PARA EL TRABAJO DISCAPACIDAD (EPT DISCAPACIDAD) y es una línea administrada por el ministerio de Trabajo a través de las Gerencias de Empleo y Capacitación (GECAL). Nosotros implementamos el programa para reforzar el personal de planta en temporada. Vamos conformando grupos de 4 o 6 personas, en turno mañana y turno tarde. Este tiene una duración de uno a seis meses y es por 4 horas diarias. Al terminar ese periodo se opta por efectivizar o no al empleado y esto se lo puede hacer con otros programas vigentes como es el PIL.
CIDEM: Mas allá de posicionarse como una empresa comprometida con la responsabilidad social, ¿Existen beneficios económicos para las empresas que se sumen al programa?.
IG: Así es. Participar de estas iniciativas otorga a las empresas descuentos en impuestos a las ganancias en el caso de personas de planta permanente. En el caso de adoptar el programa, es el estado quien aporta la mayor parte del incentivo que reciben las personas por su trabajo, lo cual aliviana notablemente la inversión de sumar gente al plantel laboral.
CIDEM: ¿Cómo ha sido el impacto del programa en el crecimiento de la nómina laboral?
IG: En Industrias Maya trabajan actualmente 4 personas con capacidades diferentes que son efectivas con antigüedades que van de 8 a 15 años, pero han pasado más de 15 personas con capacidades diferentes en los últimos años gracias al programa ENTRENAMIENTO PARA EL TRABAJO.(EPT DISCAPACIDAD)
CIDEM: Por último, ¿qué mensaje les darías tus colegas empresarios?.
IG: Les recomendaría que se animen a trabajar con inclusión de personas con capacidades diferentes. Les reportará una gran satisfacción a nivel personal y laboral. Es muy positivo, sobre todo en tareas rutinarias dado que ellos encuentran en este tipo de actividades confianza y seguridad. Además suelen ser muy responsables y quieren superarse día a día. A esto se suma que el resto de los empleados aprenden y replican las buenas costumbres.